"Luminoso como Ra, he aquí que el Ojo centelleante de Horus aparece
en el Horizonte, sus movimientos están llenos de armonía, y él destruye el triple
dominio de Set" El conjunto de las creencias egipcias escapa a una exposición orgánica
y sistemática debido al fraccionamiento regional del país, a la larga historia de
Egipto, con sus cambios de conceptos religiosos y, finalmente, al fundamental eclecticismo
religioso de los egipcios, que acogió creencias aparentemente contradictorias y
mantuvo otras ya rebasadas. Para su estudio tenemos los relatos de los autores griegos
y latinos (a menudo falsificadores del verdadero fenómeno religioso) y fuentes indígenas,
como textos y monumentos figurados.
El fraccionamiento geográfico dio lugar,
desde la prehistoria, a toda una serie de divinidades locales, que a veces se modificaron
debido a diferencias locales, debido a algún acontecimiento histórico: por ejemplo,
el dios de una ciudad vencedora, o también “Quedar”, junto a aquél en posición subordinada.
Algunos dioses tenían aspecto de animal, o aspecto humano con cabeza de animal,
probablemente más como signo de cualidad súper humana que como recuerdo de un originario
culto totémico. Muchos animales se consideraban seres divinos o encarnaciones divinas
y, por lo tanto eran venerados, embalsamándolos y enterrándoles a su muerte; entre
ellos recordaremos el buey Apis (en Menfis), el carnero (en Mende, el halcón, el
ibis, el cocodrilo, el gato, el hipopótamo, alguna variedad de serpientes, etc.
Entre las divinidades locales más importantes hay que citar: en Elefantina, el dios
Khnemu con cabeza de carnero; en Coptos, las diosas Sati y Anuki; en Edfú, una forma
del dios Halcón Horus, en el Kab, la diosa/buitre Nekhbet; en Hierakómpolis, otra
forma de Horus, y en Tebas, el dios guerrero Mont, suplantado luego por Amón y su
esposa Mut.
En Coptos se veneraba asimismo el dios Min y también en Akhmim;
y en Déndera, la diosa Hathor, a menudo representada en forma de becerra. Dioses
con aspecto canino, protectores de los muertos, eran objeto de culto en Abidos,
Cinópolis y Siut, con los nombres, respectivamente, de Khenty Amentyu, Anubis y
We-Waut. En Hermópolis se veneraba a Thot, dios de la sabiduría, representado una
veces como ibis y otras como cinocéfalo.
DIOSES EGIPCIOS
AMÓN: El nombre significa "lo que está escondido",
o lo que no se puede ver, estaba representado en diversas formas, con la forma de
un hombre sentado en un trono, con la cabeza de una rana y el cuerpo de un hombre,
con la cabeza de una serpiente, como un mono o como un león, pero la forma más común
era la de un hombre con barba que llevaba en su cabeza dos plumas largas y rectas,
viste una túnica de lino, pulseras y un collar, y cuelga de su parte posterior una
cola, denotando que era un dios de los tiempos primitivos, fue considerado al pasar
de los tiempos y de las diversas fusiones con otros dioses "Rey de los dioses" ANUBIS:
El Dios de la Muerte, titulado "Soberano de la Tierra Sagrada" (o sea La Necrópolis),
tenía normalmente forma de cánido, aunque la especie (perro o chacal), no la precisaron
los egipcios con exactitud.
Fue dios tutelar de la ciudad de Cinópolis, en
Egipto Central. Se le consideraba la divinidad más importante del Amenti o infierno,
y el acusador de las almas que comparecían en el juicio final del mito osiriano,
suele señalársele como hermano de Osiris, o hijo adultero de éste y Neftis, o hijo
de Set y Neftis, en la síntesis solar aparece como hijo de Ra. Al introducirse el
culto de Osiris, Anubis se convirtió en subordinado del nuevo soberano de los muertos,
dirigía la operación de pesaje de los corazones en el "Juicio de los Muertos".
BAST: Contrario a la feroz Sekhmet, representaba el suave calor fertilizante del Sol. Al gato le gusta calentarse con el Sol, y es probable que por esta razón este animal sea el que represente a dicha diosa. Era la diosa de la parte oriental del delta, y era venerada en Bubastis, en el Egipto Inferior. A pesar de que esté relacionada con el fuego y el Sol, parece que también tiene alguna relación con el disco lunar, ya que su hijo es Khonsu el dios de la Luna.
GHEB: Conocido como "el Príncipe de los Dioses", dios de la Tierra y esposo de su contraparte Nut, se le representaba con la piel verde u oscura, colores que representan la tierra del Nilo, su vegetación y la vida. Era hijo de Shu y Tefnut; tuvo 4 hijos: Osiris, Isis, Set y Neftis. Su centro de culto fue Heliópolis, donde con Nut produjo "El gran Huevo" del que surgió el Mundo. Su risa provocaba los terremotos.
HAPI: Este dios estaba especialmente relacionado con el gran río del que Egipto recibía su sustento, y por ello era un dios de enorme importancia en el panteón egipcio. En algunos textos antiguos se representa al dios Hapi como un ser con una fuerza destructiva, sin duda simbolizando las inundaciones causadas tan frecuentemente por el río Nilo. Hapi posee poderes tanto varoniles como femeninos, esté último indicando sus poderes nutritivos. Como dios del Norte del Nilo está coronado con platas de papiro, y como dios de la parte del Sur del Río Nilo con plantas de Loto.
HATHOR: Patrona de las mujeres, del amor y del placer, dama del cielo y dueña del mundo subterráneo. La forma original de veneración de Hathor era la vaca, luego fue representada como una mujer con la cabeza de una vaca y por último, con la cabeza humana, la cara ancha, bondadosa, plácida y, sin duda bovina, conservando a veces las orejas o los cuernos del animal que representaba. El nombre Hathor significa "casa de Horus", es decir, el cielo, donde habitaba el Sol Horus, y no cabe duda de que en una época Hathor fuera considerada una diosa del cielo, o diosa del cielo oriental, donde nació Horus.
HORUS: Originalmente, Horus, era concebido como un dios del cielo, su imagen era el halcón con las alas abiertas, el sol y la luna eran sus ojos. Gracias a la visión dualística del mundo egipcio, Horus tenía por rival a Set, su hermano, luchando con él, Horus perdió un ojo, pero al final los dos dioses se pusieron de acuerdo sobre el dominio de Egipto, cuando el culto de Osiris ganó en importancia. Horus se convirtió en el hijo de Osiris y en el sobrino de Set. Horus fue venerado en muchas formas, como Horus el Anciano, estaba representado por un hombre con la cabeza de un halcón, y se creía que fuera hijo de Gheb y Nut, puede que el mismo Horus fuera considerado como la cara del cielo, la expresión de los cielos, y que como Horus el Anciano representaba la cara del día en contraste con Set, que era la cara de la noche.
ISIS: Según la mitología, era hija de Gheb y Nut, esposa y hermana de Osiris, el nombre de la diosa significaba probablemente "Sasiento", "trono" y se escribía con un signo idéntico al que ella llevaba sobre la cabeza. Isis protegía a su hijo Horus, de la envidia y maldad de Set, el cual le enviaba serpientes, animales feroces y demás peligros. La gran humanidad de Isis, su amor conyugal y su afecto materno, unidos a sus artes mágicas, hicieron de esta diosa una de las divinidades más amadas por el pueblo egipcio, tanto así que su culto sobrevivió aún en forma de misterio en los tiempos griegos y romanos.
KHNEMU: Es probablemente un dios de los egipcios
predinásticos, estaba simbolizado por un carnero, que parece haber entrado al país
por el Este, suele ser representado por la forma de un hombre con cabeza de carnero
llevando una corona blanca y a veces un disco. Su nombre significa "Constructor"
o "Estructurador" y fue quien representó al primer hombre sobre torno de alfarero,
que hizo el primer huevo de donde surgió el Sol, moldeó los cuerpos de los dioses
y siguió construyéndolos y preservándolos.
KHONSU: Dios
de la Luna adorado en Tebas, es hijo de Amón y Mut. Se le representa como un hombre
con barba y coleta lateral o en su representación celeste con cabeza de halcón con
una luna creciente sobre la cabeza que rodea el disco solar. Según algunos textos
aparece como encargado de ayudar al rey en la caza y alimentar a los dioses. Se
le conocía como "el magnánimo", o "el deambulador", en su aspecto celeste. En Menfis
era hijo de Sokar.
MUT: Era la esposa de Amón, y por ende
considerada la "madre del mundo", suele estar representada por una mujer que lleva
las coronas unificadas del Norte al Sur, con un cetro de papiro en las manos, en
algunas imágenes está dibujada con alas, y en otras se representan las cabezas de
unos buitres en sus hombros. Como su esposo, a veces está adornada con todo tipo
de atributos, humanos y animales, para representar a su naturaleza universal. Su
veneración estaba en Tebas, donde su templo se hallaba un poco al Sur de la capilla
de Amón-Ra. Era llamada la "dama del cielo" y la "reina de los dioses", y su símbolo
jeroglífico, un buitre, era llevado en las coronas de las reinas de Egipto como
típico de su maternidad.
NEFTIS: La contraparte femenina
de Set era Neftis. Hija de Gheb y Nut, hermana y esposa de Set, y madre de Anubis,
pero no se sabe si el padre era Osiris o Set. Aunque Neftis esta relacionada con
Set, parece ser más fiel a su hermana Isis, a quien ayudó a recoger los restos esparcidos
de Osiris. Viene representada en la forma de una mujer que lleva sobre su cabeza
el símbolo de su nombre (la señora de la casa), es decir una cesta y una casa, aunque
en algunos casos se dice que es representante de la corrupción.
NUT:
Era la hija de Shu y Tefnut, la esposa de Gheb y la madre de Osiris, Isis, Set y
Neftis. Personificaba al cielo y el panteón del cielo. Por ser la Madre de los dioses,
adoptaba muchas formas y disfraces, pero su aspecto más común es el de la mujer
apoyada en las manos y los pies, formando con su cuerpo un arco, representando de
esta manera al cielo.
OSIRIS: Hijo de los dioses de la Tierra
y el Cielo, Gheb y Nut, Osiris se convirtió en el dios de la muerte y este aspecto
gozó de gran popularidad, siendo tanto ésta que reemplazó al mismo Anubis en el
ritual de pesaje de corazones y juicio de almas. Se le representaba con cabeza de
toro, algunas veces con cabeza de ave, etc., con el cetro y el látigo entre las
manos y la corona sobre su cabeza. Algunas veces el rito de Osiris se extendía de
manera tal que incluso en ciertas regiones se le llegó a considerar un dios agrario
y patrono de los labradores de tierra.
PTAH: Era el más
grande de los dioses de Menfis. Personificaba al Sol naciente, o más bien, a una
fase, representaba al Sol cuando empieza a subir por el horizonte, o inmediatamente
después de haber ascendido. El nombre de Ptah quiere decir "escultor" o "grabador",
ya que era el dios de todas las artesanías. Ptah suele estar representado como un
hombre calvo con barba, vistiendo ropas estrechas, de su cuello cuelga un Menat,
el símbolo de la felicidad, y junto con la insignia común de la soberanía y la divinidad
lleva el símbolo de la estabilidad. Fue Ptah quien en compañía de Khnemu, ejecutó
las órdenes de Thot con respecto a la creación del universo, Khnemu se encargó de
moldear a los animales, mientras Ptah hizo los cielos y la tierra; hizo una gran
placa de metal que se supone que formaba la puerta del paraíso y el techo del cielo,
así como construyó las bases que lo sostenían.
SEKHMET:
Es la contraparte femenina del dios Ptah, era la personificación del feroz calor
destructivo de los rayos del Sol, tenía la cabeza de una leona, y se puede considerar
que tuviera la misma relación con Bast que Neftis con Isis. Uno de sus nombres es
Nesert, la llama, en el que personifica al elemento destructor.
SET:
Su animal sagrado no ha sido identificado todavía, pero presenta rasgos del asno
o burro, es hijo de Gheb y Nut y por consiguiente hermano de Osiris, a quien mato
por medio de un juego sucio. En principio fue divinidad del carácter tormentoso,
dios de la tempestad y del desierto, pero llegó a ser más tarde señor de los países
extranjeros y adorado por poblaciones asiáticas. Aunque la gran mayoría del tiempo
se considera a Set como la maldad personificada, esto no siempre fue así, ya que
en el Libro de los Muertos se aprecia a Set como el amigo de los muertos, e incluso
ayudó a Osiris a alcanzar el cielo mediante una escalera.
SHU:
Dios de Leontópolis, representaba el dios del aire y portador del cielo. Era un
poder cósmico antiguo, representado como un hombre que lleva una pluma de avestruz
en la cabeza, con el cetro de papiro y el Ankh, o separando a Nut de Gheb.
THOT: Patrono de la sabiduría, contador de las estrellas, el
medidor y enumerador de la Tierra, señor de las leyes y de los textos sagrados,
escriba de los dioses, y como poseedor del conocimiento del discurso divino, en
el cual era insuperable. Su culto, originario probablemente del delta del Nilo,
tenía su centro en Hermópolis, era representado como un ibis o un papión, o como
un hombre con cabeza de ibis, lleva en la cabeza la Luna creciente y el disco, la
corona Atef y las coronas del Norte y Sur. En la leyenda de Osiris era visir del
mismo; compañero de Anubis además fue dios de la Luna y por tanto, patrono de los
cálculos del tiempo. A Thot se le atribuyeron los poderes mentales de Ra, y efectivamente
las máximas de Ra parecen haber emanado de sus labios.
ALGUNAS LEYENDAS
Numerosos mitos unen a los dioses entre sí; el más conocido es
el de Osiris, el cual gobernaba en Egipto como un rey sabio y justo, enseñando a
sus súbditos a labrar la tierra, obedecer las leyes, pero su hermano Set (encarnación
del mal), envidioso por el éxito de su hermano, le tendió una trampa, invitándolo
a un festín, en el cual preparó un cofre que prometió obsequiar a quien entrara
exactamente en él.
Curiosamente ninguno de los invitados logro realizar tal
proeza, salvo su hermano Osiris, que sí lo consiguió, al instante de introducirse
al cofre, Set, junto con algunos cómplices, lanzó a Osiris al río Nilo.
Cuando
Isis supo del complot cometido, se marcho vertiginosamente al río, gracias a sus
poderes logro encontrar a su esposo, ocultándolo en el pantano, no obstante Set,
logro encontrar el escondite y lleno de ira, descuartizo el cadáver de Osiris y
nuevamente lo arrojo al río, Isis al no saber nada de su esposo, comenzó a buscarlo
en el pantano, sin embargo lo único que logro fue conseguir pedazos y enterró cada
uno de ellos en el sitio donde los encontró, posteriormente Horus, hijo póstumo
de Osiris, se enfrentó a Set, para vengar a su padre y así subir al trono de Egipto
y poder seguir con la labor desempeñada por su padre.
El
Cerdo Negro: Ra, Set y Horus están implicados en una leyenda egipcia que
intenta explicar los eclipses del Sol y la Luna. Set y Horus eran amargos rivales,
pero Set no se atrevió a entrar en combate abierto, ya que temía a Horus como la
maldad teme al bien. Así que maquinó unos planes que le permitieran derrotar a su
temible enemigo.
Un día Horus buscó a Ra con la petición de que se le permitiese
leer el futuro en sus ojos. Ra le otorgó dicha petición voluntariamente debido a
su amor por Horus, el ser amado de los dioses y del hombre. Mientras conversaban
pasó a su lado un cerdo negro, un enorme animal siniestro, de aspecto feroz, con
ojos que brillaban con astucia y crueldad. Ahora bien, aunque ni Ra ni Horus fueron
conscientes del hecho, el cerdo negro era el mismo Set, que tenía el poder de adoptar
la forma de cualquier animal que quisiera. "Qué monstruo más malvado", exclamó Ra,
al mirar al animal. También Horus dirigió su mirada hacia el cerdo negro que seguí
sin reconocer como su enemigo. Ésta era la oportunidad de Set, se abalanzó sobre
Horus arrancándole un ojo y se lo tragó, pero Ra le obligó a devolvérselo. Sin duda,
los ojos de Horus son el Sol y la Luna, uno de los cuales es tragado o destruido
por el "cerdo negro" durante un eclipse. La devolución de la luz a la tierra acaece
gracias a ala felicidad de Horus por ser obsequiado con la ciudad de Pe. Maldición
y Nacimiento: Nut, la diosa del cielo, era la mujer de Ra. Sin embargo, era amada
por Gheb a cuyo amor correspondía. Cuando Ra descubrió la infidelidad de su esposa,
se puso rabioso y la maldijo, diciendo que su hijo no nacería en ningún mes ni en
ningún año. La maldición del poderoso Ra no podía ser ignorada, debido a que Ra
era el jefe de todos los dioses. Angustiada, Nut apeló al dios Thot, quien también
la amaba, Thot sabía que la maldición de Ra debía cumplirse, pero encontró una vía
de salida al problema, mediante una estratagema muy hábil. Acudió a la diosa de
la Luna, cuya luz rivalizaba con la del Sol mismo, y le retó a un juego de mesa.
Las apuestas por ambos lados eran altas, pero la diosa de la Luna apostó un poco
de su luz, la decimoséptima parte de cada una de sus iluminaciones, y perdió. De
aquí procede que su luz mengua y disminuye en ciertos períodos, de tal forma que
ya no es rival del Sol.
De la luz que le había arrebatado a la diosa de la
luna, Thot creó cinco días, de tal manera que no pertenecían ni al año anterior,
ni al año siguiente, ni a un mes. Nut tuvo a sus cinco hijos durante esos días:
Osiris nació el primer día, Horus el segundo día, Set el tercer día, Isis el cuarto
día y Neftis el quinto. Los Siete Seres Sabios: Se encuentra en ocasiones a Ptah
en compañía de unos seres llamados Los siete Seres Sabios de la diosa Meh-urt, que
era su madre. Salían del agua, de la pupila del ojo de Ra, y adoptaron la forma
de siete halcones, que salieron volando, y junto con Thot presidieron la enseñanza
y las letras. Ptah, como arquitecto, realizando los diseños de Thot y sus acompañantes,
de igual modo que la diosa Sekhmet, tenía algo de sus atributos. Ojo de la Luna:
El ojo izquierdo de Horus, representaba a la Luna, lucharon Set y Horus por este
ojo, finalmente el malvado Set consiguió robarlo y devorárselo (menguante lunar),
pero Horus mismo le arrebató el ojo a su enemigo con la ayuda de otros dioses, extirpándolo
del vientre de su envidioso tío. Horus se lo presentó a su padre Osiris, ayudándole
así a obtener una nueva vida. Pesando el Corazón: El Juicio final se celebraba en
la Sala de las dos verdades. En ella, Anubis pesaba el corazón del difunto para
comprobar el peso causado por los pecados cometidos. Si era más ligero que la pluma
de la verdad, la persona vivía eternamente. Si no, arrojaban el corazón al monstruo
Ammit, "Devorador de muertos".
LIBROS SAGRADOS
El Libro de los Muertos: Eran una colección de fórmulas funerarias que se escribían en rollos de papiro ricamente ilustrados y que acompañaban al muerto a su tumba. La manera como esta estructurado el libro revelan una tendencia mágica espiritual, puesto que en su mayoría esta compuesto de himnos, plegarias, conjuros. Los textos de las Pirámides, así como los textos de los Sarcófagos, son considerados como sagradas escrituras.
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