En el Rito de York, a los Grados del Real Arco se le conocen también
como Grados Capitulares, pues estos Grados se trabajan, masónicamente hablando,
en Capítulos y no en Logias, como sucede en la Masonería Simbólica.
Desde
sus inicios, la Francmasonería considerá a estos Grados Capitulares como los más
importantes de la Orden. En 1813, cuando las dos Grandes Logias de Inglaterra se
unieron, proclamaron: "La Masonería Antigua pura consta de solo tres grados, es
decir, el de Aprendiz Masón, Compañero Francmasón y Maestro Masón, incluyendo la
Orden Suprema del Arco Real Sagrado".
La Masonería Capitular o del Arco Real
no es un Grado por si solo, sino que consiste en culminar el tercero, que se encuentra
incompleto (en todos los ritos), por lo que la experiencia de un Maestro Masón (aunque
posea los 33 Grados que otorga el Supremo Consejo del Rito Escocés Antiguo y Aceptado)
no es completa hasta que haya sido exaltado a esta Orden Sagrada que representa
el verdadero esplendor de la Masonería.
El Capítulo Real Arco confiere cuatro
grados:
Búsqueda en el
|
Copyright © 2018 - Todos los derechos reservados - Emilio Ruiz Figuerola