Las letras Yod-He-Vav-He son las que conforman el nombre
de Jehová. Forman parte del código hebraico y los masones las consideran sus
palabras sagradas (las tres primeras, puesto que la cuarta es una repetición
de la segunda), y cada una de las iniciaciones se relaciona con cada uno de
los tres grados simbólicos.
La primera le será comunicada al
Aprendiz; la segunda, al Compañero, y la tercera, al Maestro. Este modo de
proceder, lejos de ser arbitrario o caprichoso, esconde un significado
profundo, ya que estas letras contienen una gran fuerza que es preciso
domesticar, volver dócil y utilizable, y es natural que para conseguirlo se
necesite un lapso de tiempo.
Yod-He-Vav-He son las cuatro letras que
empleó Moisés para escribir el nombre de la divinidad. Traducido al lenguaje
convencional, la palabra suena Jehová, y su traducción esotérica es la de:
«ser que fue, que es y que será», o sea, la imagen de lo permanente.
Pero esa palabra que describe la divinidad define al mismo tiempo el proceso
de la creación, por lo que estaríamos hablando del macrocosmos y del
microcosmos. Conocer ese proceso, como dato histórico, ya es interesante de
por sí, pero lo es aún más cuando se nos dice que ese proceso de creación
tiene lugar cada vez que nosotros hacemos algo. Es decir, cuando nos
disponemos a emprender cualquier obra, un negocio, una creación artística,
una conquista sentimental, debemos pasar por las cuatro fases que
representan las cuatro letras. Así se cumple la ley hermética que reza:
«lo
de arriba es igual a lo de abajo, y viceversa».
El G.·.A.·.D.·.U.·. creó por el
mismo procedimiento que nosotros utilizamos, y si nos alejamos de él las
cosas fallan, la obra se hunde. Es natural que una sociedad de
constructores, como la Masonería, ponga gran cuidado en otorgar el título de
constructor de la sociedad (con las claves que conlleva) sólo a aquellos que
están preparados para trabajar con las herramientas correspondientes a su
grado, en cada una de las fases necesarias para la edificación: albañil
(Aprendiz); aparejador (Compañero); arquitecto
(Maestro).
Búsqueda en el
|
Copyright © 2018 - Todos los derechos reservados - Emilio Ruiz Figuerola